Alcanzando la excelencia donde cada niño importa.
El colegio Británico St. George situado en la ciudad de Barcelona, imparte clases desde los dos años de edad. El colegio está plenamente autorizado por el gobierno autonómico y las autoridades británicas. Es miembro de la prestigiosa Asociación Nacional de Colegios Británicos en España (NABBS) y forma parte del mayor grupo de colegios británicos del país, con centros en Almería, Madrid, Málaga y Sevilla.
El colegio está formado por una comunidad internacional, con un 50 % de familias que provienen de más de 40 países diferentes. Un ambiente familiar donde los niños crecen y se enriquecen de dicha diversidad. Les enseñan que todos somos iguales pero al mismo tiempo diferentes y que esa es la gran riqueza de mundo. Diferentes culturas, nacionalidades, religiones, idiomas maternos, así como diferentes habilidades y velocidades de aprendizaje. Y debido a esa diferencia natural que todos tenemos, ofrecen una enseñanza personalizada y diferenciada. Donde cada niño recibe sus propios objetivos, basados en sus habilidades, capacidades y aptitudes. Motivando y animando a cada niño a alcanzar su máximo potencial.
Sus cinco valores son su nexo de unión y pilares entre tanta diversidad. El respeto, la responsabilidad, la bondad, el ser justos y dar lo mejor de uno mismo son los pilares del colegio.
Sus profesores son todos británicos. Son comprometidos, apasionados y ponen todo su esfuerzo en apoyar a los alumnos para desarrollar al máximo todas sus capacidades. La enseñanza diferenciada y el llevar un seguimiento minucioso y exhaustivo del avance de cada niño es la base de su programa. Las lecciones son desafiantes, vibrantes, emocionantes y programadas para que cada niño avance en su nivel. Las clases son creativas, basadas en la resolución de problemas, búsqueda de información, presentación de proyectos, así como el aprendizaje de conceptos. Animan a los alumnos a hacer conexiones entre diferentes áreas temáticas, para alentar el “por qué” como parte del aprendizaje diario y para estimular el pensamiento y la solución creativa de problemas. Les enseñan a pensar y a comprender, no simplemente a memorizar. Se valora ante todo el esfuerzo, tomar riesgos intelectuales, buscar nuevos retos o demostrar la persistencia y perseverancia ante las dificultades.
La comunicación entre la familia y el colegio es fundamental para poder asegura que se está trabajando en la misma dirección. Donde en ambos lugares la prioridad es la misma, el niño.
Los alumnos reciben íntegramente el currículum británico tal y como harían si estuvieran en Inglaterra, además imparten las asignaturas de sociales, lengua castellana y catalana. Los estudios están reconocidos y homologados de forma que les permiten acceder tanto a las universidades públicas o privadas nacionales como a las universidades internacionales.
St. George ha alcanzado su prestigio gracias a un alto nivel académico. Sus alumnos son embajadores del colegio y marcan la diferencia en las comunidades en las que se integran.
Aprender debe ser algo emocionante y motivador. Su aspiración es que cada niño salga del colegio preparado para la sociedad actual con un alto nivel académico y habiendo desarrollado todo su potencial. Forjan jóvenes educados y respetuosos, con gran inteligencia emocional, excelentes dotes de comunicación y capaces de pensar y de resolver problemas por sí mismos.
En definitiva, trabajan para que se conviertan en jóvenes adultos felices y con la formación adecuada para contribuir de manera significativa al mundo moderno.
El colegio realiza visitas individualizadas bajo cita previa.
