Xavier Valls y Jean-François Pontroué Responsables de CPI Black Print
“Black Print es una de las imprentas monocromo más eficientes de Europa”
-¿Cuáles son los orígenes de CPI Black Print?
X.V.: La compañía nació hace alrededor de diez años y desde el año 2010 forma parte del grupo francés CPI, el primer impresor monocromo de Europa, que cuenta con 16 plantas en varios países e imprime más de 500 millones de libros al año. Nuestra planta imprime 50 millones de ejemplares al año y nos hemos convertido en una de las referencias dentro de nuestro grupo, en especial en impresión de libros de bolsillo.
-Pero no solo en bolsillo…
J.F.P.: Tradicionalmente nos hemos dedicado al formato bolsillo, tanto español como europeo, ya que tienen dimensiones diferentes. Sin embargo, hace ya tres años que comenzamos a imprimir novedades (lo que se conoce como formato Trade) y a hacer crecer nuestra cuota de mercado en España, aunque nuestro ámbito de acción es internacional. De hecho, alrededor del 75% de nuestra producción es para editores de otros países europeos –especialmente Francia– y de los Estados Unidos.
-¿A qué perfil de cliente se dirigen?
X.V.: A editores de gran y mediano tamaño. Históricamente, Black Print se enfocaba sobre todo a la impresión de libros de bolsillo con altos volúmenes, pero la dinámica del mercado ha cambiado en los últimos años, haciendo que los pedidos sean cada vez más numerosos pero de menos ejemplares. Disponer de la flexibilidad adecuada para responder a ese nuevo panorama ha hecho que podamos acercarnos también a editores más pequeños.
-¿Qué elementos diferencian a CPI Black Print de sus competidores?
J.F.P.: Creo que lo que mejor nos define es la competitividad y el compromiso con un cliente que, hoy en día, busca proveedores que sean proactivos, rápidos, eficientes y, como le comentaba, flexibles. En este sentido, el hecho de haber entrado en el mercado de las novedades ha hecho que sea fundamental poder abastecer rápidamente a un cliente cuando las ventas de un libro se disparan.
X.V.: Otro aspecto importante es que somos una de las imprentas que más ha invertido, tanto en capacidad de producción como a la hora de poner a disposición de nuestros clientes la mejor tecnología. Ese esfuerzo nos ha convertido en una de las empresas más productivas y más eficientes de Europa y son varias las plantas del grupo que nos visitan para adoptar nuestra fórmula.
-Tecnología y equipo humano…
X.V.: El equipo humano está muy comprometido con el proyecto y es un componente básico de nuestro éxito. Sin esta armonía social y esa implicación con la vocación de servicio y calidad no lograríamos sacar adelante esos 50 millones de libros. Somos un equipo cohesionado e involucrado y con una muy baja rotación, lo que implica que quien trabaja con nosotros se siente a gusto. Hoy en día y tras incrementar en un 20% la plantilla en los últimos dos años, somos 139 las personas que trabajamos en Black Print.
-¿Cuáles son los retos de futuro de CPI Black Print?
J.F.P.: La entrada en el formato Trade ha hecho que nuestra estrategia de los tres últimos años se focalice en el mercado español, que es prioritario para nosotros. Hemos reforzado nuestra estructura comercial en Barcelona y Madrid y la intención es continuar creciendo en nuestro país.
