Felix Balbas y Maurizio Giglioli Responsables de Minimo VFX
“Animación y Efectos Visuales Internacionales desde Barcelona”
-¿Cómo nació Minimo VFX?
FB: Comencé a trabajar en el mundo de los efectos visuales en el 1992, primero en Italia y, sucesivamente, en Alemania, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Londres. Allí fue donde conocí a Maurizio y donde decidimos que era hora de crear nuestro propio estudio.
-En Barcelona…
FB: Así es. Barcelona no tiene raíces profundas en la industria del sector, ni tampoco se encuentran aquí los centros de decisión de las grandes productoras, pero sí un peso importante de todo lo que tiene que ver con el diseño y la creatividad. Además, ofrece una gran calidad de vida y todo suma…
-¿En qué proyectos han participado?
MG: En todos estos años hemos formado parte en la parte visual de películas como Avatar, la saga de El Señor de los Anillos, X-Men 2, Piratas del Caribe o varias películas de Harry Potter. La lista sería muy larga, pero todas tienen en común una gran exigencia por parte de los clientes.
-¿Exigencia tecnológica?
MG: Tecnológica sí, pero creativa. Es evidente que para nosotros la tecnología tiene un peso importante, pero las máquinas son herramientas que nos permiten traducir nuestra habilidad creativa y artística en un producto final. La tecnología hace que podamos trabajar más rápidamente, pero lo que prima es la voluntad de hacer bien las cosas. Todo nuestro equipo es capaz de darle mil y una vueltas a las cosas antes de darlas por terminadas.
-¿Qué diferencia a Minimo VFX de sus competidores?
FB: Minimo VFX resulta muy útil en el diseño y producción de elementos (especialmente personajes y monstruos) para efectos visuales que otras productoras después utilizan en sus piezas. Un ejemplo serían los personajes digitales en el cine, como en el caso de “Un Monstruo Viene a verme”. Lo que nos diferencia es nuestra relación calidad/eficiencia a la que sumamos supervisión y asesoramiento para que nuestros clientes se beneficien de nuestra experiencia de mas de 25 años.
-Y no hay dos proyectos iguales…
MG: No. Aunque pueda parecer lo mismo, no es igual trabajar para una superproducción como las que mencionaba antes que en publicidad o incluso en parques temáticos, donde las variables que influyen en nuestra labor cambian mucho. Ahí es donde entra en juego el carácter artístico del equipo de Minimo VFX.
-Decía antes que en Barcelona no existe una industria de efectos. ¿Qué pasos están dando desde la empresa para avanzar en ese sentido?
FB: Por nuestra parte, siempre hemos procurado trabajar para crear una cierta comunidad. Por ejemplo, organizamos b’Ars, la Barcelona International Arts & VFX Fair, que del 8 al 11 de junio celebrará su cuarta edición.
Por otra parte, con la Universidad La Salle Bonanova, soy director del Grado Universitario Oficial en Animación y Efectos Visuales (VFX), que pretende ofrecer a los jóvenes la posibilidad de formarse en esta profesión.
-¿Cuáles son los retos de futuro de Minimo VFX?
FB: Hoy tenemos varios proyectos en marcha. Sin embargo, estamos estudiando comenzar a introducirnos en la creación de contenidos propios para, sin abandonar los servicios de siempre, ofrecer valor añadido con nuestro trabajo.


