“Todo diseño debe tener un punto de emoción, de sentimiento”

La innovación y la comunicación son los principales ejes en torno a los que se vertebra cualquier proyecto desarrollado por salomstudio*design. El equipo que forma este estudio está compuesto por diseñadores industriales y gráficos, quiénes forman un tándem ideal para dar forma a proyectos de éxito en el ámbito del diseño de packaging. Hablamos con su fundador, Isaac Salom, sobre su labor y la de su equipo desarrollando proyectos de diseño que parten siempre desde la emoción.
Isaac Salom es diseñador industrial pero no solo ejerce como tal, ¿qué diferentes acciones dentro del diseño se llevan a cabo en salomstudio*design?
En salomstudio*design llevamos a cabo una actuación muy transversal en el diseño. En este sentido, podemos trabajar desde el diseño industrial de un electrodoméstico de cocina hasta el logotipo o un recetario del mismo. Creemos en el diseño como parte del ADN de cualquier negocio o proyecto, y eso supone integrar el diseño en áreas muy diversas.
Para poder potenciar una idea, negocio o proyecto, salomstudio*design cuenta con un equipo pluridisciplinar formado por diseñadores industriales y diseñadores gráficos que “funden” sus maneras de pensar, sus conocimientos y las herramientas que dan forma a los diseños. De esta forma, ambas figuras profesionales, la del diseñador industrial y la del gráfico, no trabajan de forma distante, sino que lo hacen de forma conjunta. Esta colaboración nos permite generar procesos de creatividad completos elaborando proyectos con gran nivel de detalle.
En salomstudio*design destacan especialmente en el diseño de packaging…
Así es. Al hilo de lo que hablábamos antes, la especialidad de diseño de packaging se encuentra justo a medio camino entre el diseñador industrial y el gráfico, por este motivo en salomstudio*design nos movemos muy cómodos en este terreno. De hecho, tenemos una gran capacidad para dar formas y soluciones innovadoras a esos packs que han de contener y comunicar los nuevos productos que se lanzan al mercado; a un mercado cada vez más feroz y exigente.

Al final, podemos decir que todo es comunicación y que la totalidad de las acciones se dirigen hacia el mismo concepto de marca, incluido el packaging industrial…
El packaging industrial es el primer impacto que recibe el consumidor sobre un producto. Es el claro ejemplo de cómo el mercado va a percibir una marca, siendo las decisiones de su diseño la puerta de entrada del producto a nuestra mente como consumidores.
Un consumidor va a ver, sentir, tocar, escoger y comprar cientos de productos a lo largo de su vida y la elección de un producto estará condicionada, en gran parte, por la capacidad de la marca para transmitirle de forma clara y concreta que el producto que contiene el pack es todo lo que necesita, tanto en el plano pragmático como en el emocional.
Por la forma en la que habla, se nota que para usted éste es un mundo apasionante…
Desde luego que sí, ya que como diseñador llegas a resultados y decisiones fantásticas. El diseño que acompaña a un producto define cómo se va a presentar al mundo y la capacidad que la marca tendrá de transmitir sus valores.
Por otro lado, disfruto trabajando en mejorar la experiencia que puede tener un usuario frente a un nuevo producto. Imagino como disfruta de la secuencia de uso, del momento de abrirlo, etc. Busco que viva una buena experiencia. Un mal diseño de packaging puede empobrecer un buen producto, y esto no pasa pocas veces…
También imparte clases en prestigiosas escuelas de diseño como Elisava o el IED, ¿qué intenta transmitir a quiénes serán los diseñadores del futuro?
Siempre valoro ese punto de emoción, de sentimiento que, desde mi punto de vista, debe tener todo diseño. Esta emoción hay que perseguirla desde la pasión, esto es lo que intento inculcarles. Este punto de emoción y sentimiento permite diferenciar y hacer que los diseños destaquen teniendo también muy clara la visión, lo que queremos lograr desde un inicio.